La Comisión Europea tomó la semana pasado una decisión que sienta las bases para hacer frente a las consecuencias de un posible bloqueo del Órgano de Apelación de la OMC, la máxima instancia de solución de diferencias de la Organización. Esta decisión permitirá a la Comisión celebrar arbitrajes con terceros países basándose en las normas actuales de la OMC.

 

Nota de prensa

Comparte esta información: